El verano significa comidas más copiosas, más cambios en la rutina, más eventos sociales… y, para muchos, también digestiones pesadas. Esto provoca que tu sistema digestivo sufra y genere molestias como hinchazón, gases o sensación de pesadez.
¿Por qué sufres digestiones pesadas en verano?
El verano altera tus rutinas y tus hábitos alimenticios. Las comidas suelen ser fuera de casa, más grasas y procesadas, se aumenta el consumo de alcohol, helados y refrescos. También, las altas temperaturas hacen que reduzcas la actividad física, y por tanto, tu actividad digestiva se ve afectada. Además, cenar y acostarse tarde repercute directamente en tu salud.
Consejos prácticos para evitar digestiones pesadas:
- Evita comidas muy copiosas, intenta hacer comidas más ligeras y frecuentes. Toma frutas, ensaladas, proteínas magras y alimentos de fácil digestión.
- Deja pasar al menos 1-2 horas antes de acostarte. Dormir con el estómago lleno ralentiza la digestión y favorece el reflujo.
- Cuida la hidratación, pero evita beber mucho durante la comida. Es mejor que te hidrates durante el día que sólo al comer.
- Incluye alimentos probióticos y ricos en fibra. Productos lácteos como yogures naturales, kéfir, verduras de hoja verde o cereales integrales favorecen la digestión.
- Añade un Pre-Post Probiótico a tu rutina para mejorar tu digestión en verano.
Beneficios del Pre-Post Probiótico
Este suplemento contiene cepas bacterianas seleccionadas para equilibrar la microbiota intestinal. Por tanto, mejora la digestión y reduce la hinchazón. Ayuda a regular el tránsito intestinal y a fortalecer el sistema inmunitario. Además, es apto para veganos, no contiene gluten ni lactosa.
El Pre-Post Probiótico previene digestiones pesadas durante épocas de desajuste intestinal, como es el verano.
No dejes que el malestar digestivo arruine tus días de calor, terrazas y vacaciones.